Finalizamos con este artículo el recorrido por la que consideramos la «discografía esencial» de la Sinfonía Nº 2 «Resurrección», de Gustav Mahler.
Eliahu Inbal y la Orquesta de la Radio de Frankfurt. Este ciclo malheriano, grabado íntegramente en el teatro de ópera antiguo de Frankfurt entre 1985 y 1986 por la compañía japonesa Denon (luego se agregaron La canción de la tierra en 1988 y la reconstrucción Cooke de la Décima sinfonía, en 1992), tiene el gran mérito de haber sido realizada con técnicas de grabación cuasi-en vivo, usando (para la mayor parte) dos mega-micrófonos multidireccionales construidos y desarrollados expresamente para este ciclo. El resultado es vívido y brillante, y con una serie de «ruidos» de escena que le dan gran impacto a la grabación, entre los que destaca el tarareo constante del director en varios pasajes de las grabaciones, lo cual es especialmente notable en la Segunda sinfonía. En su momento, la revista Gramophone le asignó notables críticas al ciclo integral y en especial a este registro, el cual rápidamente ganó mi respeto y estima, desde que me lo compartió don Fernando G. Toledo hace un par de años. Las solistas: Helen Donath (soprano) y Doris Soffel (contralto).
Lorin Maazel y la Filarmónica de Nueva York. Dicen los entendidos que ninguna orquesta está tan identificada con esta sinfonía como la Filarmonica de Nueva York (véase aquí). Con esta obra, Mahler desarrolló un notable concierto en 1909, y a partir de allí muchos maestros han hecho memorables lecturas con ella. Ya hablamos de Lenny, ahora enfoquémonos en una leyenda actual, Lorin Maazel. Esta lectura, con Jessica Jones (soprano) y Cornelia Kallisch (mezzo-soprano), corresponde a una toma en vivo realizada el entre el 19 al 21 de junio de 2003 y ha sido editada como parte del ciclo de Mahler conmemorativo de los siete años que estuvo Maazel como director titular de la Filarmónica de Nueva York. Al respecto, Anthony Tommasini escribió en el New York Times el 21 de junio de ese mismo año: «No se puede pedir por una interpretación más enfática de esta monumental obra sinfónica de hora y media de duración. El maestro Maazel dirigió la obra de memoria, con una apabullante energía y confianza: la interpretación fue precisa, radiante e incisiva, con una consistencia admirable». Maazel es un conductor de grandes cimas y grandes simas, pero en esta obra, estuvo a la altura de los mejores, con vehemencia y fuerza, es sin duda, una interpretación notable e inspirada, a medio camino entre la voluptuosidad de Solti y la majestuosidad de la lectura de Bernstein y Tennstedt.
Una mención honorífica: Gilbert Kaplan con Viena. La Segunda sinfonía era, según testimonio de Bruno Walter, la favorita de Mahler, y muchas personalidades del mundo igualmente la han tenido en igual valoración, incluyendo al papa Juan Pablo II, de quien se decía tenía más de 50 grabaciones de ella, casualmente, con la de Solti como su favorita entre todas.
Igualmente, para el empresario editorial norteamericano Gilbert Kaplan, la pasión por la Segunda de Mahler empezó a partir de que la escuchó en vivo por Stokowski en 1965. A partir de ese momento, su pasión por esta obra trascendió el gusto por escucharla y estudiarla hacia convertirse en una inspiración para formarse profesionalmente con dedicación e intensidad a la música y el arte de la conducción orquestal. Kaplan adquirió el manuscrito autógrafo de Mahler, restauró la cabaña en la campiña austríaca en donde Mahler se refugiaba a componer durante los recesos veraniegos y creó el primer museo dedicado al compositor y una Fundación encargada de preservar y exaltar el arte de Mahler. Al frente de ella, ha publicado extensivos ensayos y recopilaciones históricas dedicadas al maestro y su obra.
La pasión y devoción por esta obra le ha permitido adquirir los conocimientos musicales necesarios para conducir la sinfonía con muchas orquestas a nivel mundial (más de 50, lo que de por sí ya es admirable) y producir tres grabaciones de la «Resurrección». La primera de ellas, con la Sinfónica de Londres (1987), se convirtió en el disco de música de Mahler más vendido de la historia (se le puede encontrar en varias ediciones, la mejor de ellas, impresa por el sello inglés Conifer 51277, incluye ensayos, entrevistas, una galería fotográfica y una miniaturización de la partitura). La Segunda de Mahler en la grabación producida por DGG con la Filarmónica de Viena, Latonia Moore (mezzo-soprano) y Nadja Michael (soprano), fue realizada con una versión depurada y «corregida» de la partitura, basada en el original autógrafo que ha restaurado y estudiado la Fundación Kaplan. Mis amigos más experimentados tienden a valorar negativamente esta lectura, sienten que carece de la iluminación de los grandes maestros. Yo, modestamente, me declaro muy impresionado e inspirado por ella… Me gustan sus balances y la precisión de su construcción: fuerte y lírica a la vez, cultivada por la perseverancia en el estudio más que por el genio musical tradicionalmente entendido. La recomiendo y no dejo de disfrutarla. Es un caso único. Seguramente se trata de la única obra sinfónica que abarca prácticamente toda la carrera de un director, ya que el repertorio de Kaplan solo incluye, además, el Adagietto de la Quinta y, una sola interpretación de las Variaciones Enigma de Sir Edward Elgar.
Mi favorita: Solti y la CSO
Este es mi recomendación para ustedes de las lecturas que más me gustan, y por ello, en alianza con el editor del blog, hoy me permito compartirlas (en el caso que no las tengan). Extraoficialmente, tengo otra favorita, pero que no comparto en este momento porque aún no ha sido editada oficialmente: es una toma en vivo del joven director Danielle Gatti y la Orquesta Nacional de Francia y Coros de la Radio de Francia, que se puede obtener como descarga en iTunes de un concierto realizado en el Théâtre du Châtelet à Paris el 4 de febrero de este año. También notable, un registro que mi buen amigo Carlos Quintero me ha compartido con el maestro Seiji Ozawa y la Orquesta Saito Kinen y el Coro Shinyukai de Japón, grabado para el sello Philips.
Intencionadamente he dejado fuera dos notables, porque a mi modesta opinión en ambos casos sus lecturas de esta Sinfonía no me gustan tanto como las mencionadas previamente: son los casos de Bernard Haitink y la Concertgebouw, y todas las que ha grabado el gran maestro Pierre Boulez. En el primer caso, Haitink, consumado y respetado mahleriano (en especial en la Sexta, Séptima y Novena) no me transmite esa fuerza espiritual necesaria para captar el mensaje de la obra. Y las de Boulez son demasiado secas y cerebrales, sin ningún matiz espiritual.
¿Por qué Solti por encima de Bernstein, Tennstedt, Inbal, Maazel, Klemperer? No sé exactamente, pero así lo siento. No tengo una explicación racional que darles, sencillamente, es la que por milímetros escojo como la mejor, mi Hors concours. Mucho hace la espectacular toma de sonido, que es maravillosa (es quizás de las mejores grabaciones que conozco desde el punto de vista técnico digital), mucho hizo un detalle personal: en un debate asociado a esta grabación conoci a un gran amigo, mi querido e inolvidable Gabriel El Cuervo López, quien hace un año partió a reunirse con Mahler en la eternidad.
Fue en medio de un debate en un foro español que la voz rabiosa y apasionada de este intelectual argentino se terciaba en finas estocadas contra un foro de españoles sobre interpretación de Solti versus la de Riccardo Chailly (otra de las que intencionadamente dejo en la cuneta), que empezó hace casi cuatro años mi amistad con Gabriel y que como saben abarcó varias docenas de artículos y varios miles de intercambios de música, por supuesto, con Mahler y Rachmaninov como compositores de cabecera y Solti en la batuta. Así que, amigos, no me pidan explicaciones racionales, ésta es mi favorita y mi corazón está en ello.
Un comentario al final
¿Cómo hubiese sido una grabación de Karajan y otra de Mitropoulos de esta obra? Grandes ausentes de este podio… Karajan jamás la interpretó (únicamente abordó la Cuarta, Quinta, Sexta y Novena, más La canción de la tierra) y Mitri sí la interpretó, al menos un par de veces, pero jamás la grabó.
No podíamos esperar de Fernando Toledo más que el Oído Fino de hoy, o sea, el resultado de un trabajo dedicado. Acompañado del buen hacer de estupendos articulistas y amantes de la música, nos está acostumbrando (no podría decir que 'mal acostumbrando') a un progresivo y cada vez mayor incremento en el nivel de sus publicaciones.
ResponderEliminarMe he quedado gratamente maravillado con el adelanto del blog.
Un abrazo
Me da un error al tratar de abrir la de Maazel, como que le faltara un pedazo al final del archivo. ¿Me pasa a mí nomás?
ResponderEliminarSaludos.
Lo reviso más tarde en casa.
ResponderEliminarEl enlace de la versión de Maazel está en reparación (gracias, Barullo).
ResponderEliminarENLACE REPARADO
ResponderEliminarMuchas gracias, VEGLIO.
ResponderEliminarExcelentísimo artículo: Un ejemplo de laborioso trabajo y la envidia infinita de mi pobre petirroja.
ResponderEliminarGracias por las aclaraciones a esta espléndida sinfonía. Soy un seguidor de vuestros blogs. Pero tengo una pregunta.¿Qué tan diferente es la interpretación de Solti de la Sinfonía No.2 entre la Orquesta Sinfónica de Londres y la de Chicago? Se ha elegido como más completa la versión con Chicago ¿Pero que tan mejor es esta con la de Londres? ¿ O solo las tecnicas de grabación?
ResponderEliminarSería interesante un post aclarando todas las grabaciones de Solti de Mahler. De verdad realmente me quita el sueño vuestra opinión con respecto a cuales grabaciones son mejores? ¿Cuál Quinta? ¿Cuál cuarta? ¿Cuál Segunda? (de las de Solti obviamente)
Solti es un conductor soberbio. De esos que no tienen puntos débiles. Magistral.
(Les comentó que cuando de Mahler, se trata, voy obra a obra, para no agotarlo, aunque creo que esto es imposible. Aun no oyo ni la Séptima ni la Novena. Llevo un par de meses "fuera de mi" con la Sexta. Se que ya la irán comentando. Pero que le ven algunos melómanos a Karajan en la Sexta? No soy ningún experto pero me pareció absolutamenté insípida (Opino lo mismo de su Octava de Bruckner tanto con Viena como con Berlín, aunque tal vez con Viena sea solo desabrida..)
Hola excelente post, me estoy convirtiendo poco a poco en mahleriano, por favor no olviden al desaparecido Bertini y la Orquesta de la radio de colonia con el sello EMI, he escuchado daslied van der erde, la quinta y en especial su octava que es grandiosa!!!!!, porfa un comentario sobre él y este ciclo gracias. Melómano
ResponderEliminarCreo que las interpretaciones de Mahler se pueden agrupar en dos grandes tendencias, quienes hacen énfasis en la estructura y el discurso general de la obra (Haitink, Abbado por ejemplo) y quienes hacen de Mahler una suma kaleidoscópica de argumentos (Bernstein). Cuando conocí la obra me inclinaba por el primer grupo, pero últimamente estoy fascinado con Bernstein y Klemperer. Son directores que dirigían esta obra cuando todavía era un riesgo apostarle a Mahler, un placer casi personal. Creaban camino en la audiencia y las orquestas. De lo que si estoy seguro ahora es que no me gustan las modernas grabaciones comerciales e insipidas de un industria ávida de ventas y "best sellers", como por ejemplo la segunda de Iván Fischer....
ResponderEliminarGracias por estos tres articulos, fenomenales y didacticos. Echo de menos a Abbado.
ResponderEliminarPor quienes no la grabaron a Carlos Kleiber o Giulini.
Un saludo
Muy buenas tardes mi estimado Fernando.
ResponderEliminarRealmente no sé cómo hacer esta petición, talvez parezca mal agradecido (creeme que si algo me inspira tu trabajo es agradecimiento).
Al grano: Mi modesta petición consiste en la grabación de que hiciera Vaclav Neumann con la Orquesta Filarmónica Checa de la segunda sinfonía. La he buscado por donde he podido, pero no se si sea por mi falta de pericia al manejar el internet o es que de plano no está.
Espero que tomés en cuenta mi pequeña petición.
Gracias, y saludos desde Nicaragua.