lunes, 9 de julio de 2012
Brahms - Sinfonía Nº 1, Variaciones Haydn - Giulini
A Johannes Brahms
Yo, que soy un intruso en los jardines
Que has prodigado a la plural memoria
Del porvenir, quise cantar la gloria
Que hacia el azul erigen tus violines.
He desistido ahora. Para honrarte
No basta esa miseria que la gente
Suele apodar con vacuidad el arte.
Quien te honrare ha de ser claro y valiente.
Soy un cobarde. Soy un triste. Nada
Podrá justificar esta osadía
De cantar la magnífica alegría
–Fuego y cristal– de tu alma enamorada.
Mi servidumbre es la palabra impura,
Vástago de un concepto y de un sonido;
Ni símbolo, ni espejo, ni gemido,
Tuyo es el río que huye y que perdura.
Jorge Luis Borges
En La moneda de hierro (1976)
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En la Sinfonía número 1 Brahms incluyó la nana más famosa. En su tiempo, fue acusado de ocultar melodías muy bellas en un océano insondable de sonidos, metros, ritmos y sonidos.
ResponderEliminarBorges hace un homenaje más puro y sincero que mi nota, y refleja lo que muchos de su tiempo no encontraron en él:
"Tuyo es el río que huye y que perdura".
Más allá de Heráclito, la belleza se queda con nosotros gracias a Brahms y a Borges.
¡Mucha salud y muy muy inquieta alegría!
Gracias por la vuelta. Como siempre buenos comentarios, no sólo me refiero a este, sino a todos en general. Gracias por Brahms, Sibelius, Shotakovich, Saludos, gustavo
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